
Soy poeta
y no escribo con las manos,
ellas no hablan,
ellas no sueñan
ellas no sienten,
no lloran,
no anhelan…
Podrías mutilármelas,
cortármelas,
a ellas,
a mis dedos…
que se esfuman una noche,
y a la mañana siguiente
florecería un nuevo poema…
Alzaría mi voz a las estrellas
y sílaba a sílaba
la luna escribiría los versos.
En la niebla
con lágrimas regaría la angustia,
y al alzarse esta…
dejaría unas estrofas
escritas en los cristales.
Pues como ves…
soy poeta…
y no son mis manos
las que escriben,
pues es mi alma
la que se desgarra
para dejar salir las rimas.
Romero de Buñol
17-08-2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario