amanece

Amanece tu perfume de amor
abrazado a mi,
la fruta que nace en tus labios
por tu cuerpo se esparce,
y el mío se contagia con tu deseo.

Desnudo tu cuerpo y bebo,
Bebo el cálido frenesí que te cubre,
bebo la ambrosía de tu juventud
bebo la sinrazón de tu ser.
bebo tu cuerpo de mujer.

Y a cada sorbo me emborracho
y el deseo de gozarte invade mi ser,
Te oigo gemir, jadear, gritar
y la locura llena toda alcoba
hasta que me rindo a tu deseo,

Mi cuerpo entra en ti como aguijón punzante,
tu cuerpo me abraza y tu boca me muerde.
grito, pero no me rindo y te poseo,
gritas y pides más.

Araño tu cuerpo desnudo y ardiente,
mientras me resisto a rendirme a ti.
Roncos alaridos salen de mi boca
mientras tu cuerpo derrota al mío.

Caigo exhausto a tu lado,
para morir besando tus labios,
acariciando tu cuerpo aterciopelado
que ardiente todavía me desea…

El canto de la mañana me revive,
para nuevamente me pierdo en tus besos
para gozar de tu cuerpo otra vez.

Mi lengua provoca en ti un alarido de placer,
que calladamente te hace retorcer,
mientras lucho para no apartar mi lengua,
y oírte gozar desmesurada.

Suavemente me pides que te vuelva a poseer,
que gocé de ti, que goce de tu rendición,
que me vuelva verter en los valles de tu lujuria,
y vuelva a rendirme a ti…
con todo mi fulgor…
con toda mi pasión.

Paco
29-o3-10