Siento que entra el vino
y barre el recuerdo,
ese que no quería olvidar.
Se lleva en cada sorbo
toda huella que dejaste en mi,
toda huella que me hacia diferente…
A cada trago…
se marcha mi vida
junto con tu recuerdo,
se precipita mi ser
en la melancólica ausencia,
en el compás suspendido
de un péndulo inmóvil…
Si…
bebo e intento olvidarte…
bebo y te recuerdo...
bebo y bebo
y cuando ya ebrio me caigo…
es cuando mi mente se aleja de ti…
y es…
cuando lo revivo todo en mi.
Apenado, taciturno…
busco otra botella de vino
y me sumerjo más todavía
buscando el olvido…
buscando mi muerte.
Romero de Buñol
06-03-13
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