¿Dónde me lleva
el oleaje de la vida?
Nuevamente
surco este mar de soledad,
y otra vez el rumbo
lo marcan las olas
que encabritadas
dirigen el timón.
Si,
ya sé que soy yo el capitán
el que ha de marcar el rumbo
que mi vida ha de llevar.
ya sé que soy yo
el que ha perseguir sus sueños
y luchar por sus anhelos…
Sí,
ya sé,
sé que así no encontraré un puerto
donde la mansedumbre de sus olas
permitan mi tranquilidad,
sé que así mi vida encallará
en algún bando de miedos y desolación,
sé que así muero derrotado.
Pero navegué tanto tiempo
con todo mi velamen extendido,
pero navegué tanto tiempo
con todo el ímpetu de mi ser…
y cuando llegaba a un puerto
de mansas aguas…
estaba tan desolado,
con aguas tan turbias…
que nuevamente tenía que partir...
Así pues…
que ya no bogo hacia ninguno,
arrastro mi bola de carcelario
y dejo que el oleaje me lleve…
¿Mañana?
Quien sabe mañana que viento soplara
y quien sabe si una sirena cantará
y su canto me haga desplegar todo el trapo
y partir a su encuentro…
quien sabe mañana…
quien sabe…
Romero de Buñol
03-05-12
1 comentario:
Al mañana hay que invitarle a una copa de vino y brindar por el día siguiente, si no se hace así el mañana te engulle, brindo por el día siguiente a mañana. Un saludo Paco
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