Callo hoy,
el día que el pichón deja el nido
y la paloma, destrozada, coge el vuelo
yo… callo… y mi voz hoy se torna llanto.
La paloma vuela llenando mares de lágrimas,
el pichón sale del nido llorando…
sabiendo que su madre jamás la podrá olvidar,
sabiendo… que ella nunca olvidará…
el arrullo de su madre,
sus besos…su cuidado…
Pero el pichón busca…
y de su made se separa…
Vuela paloma… vuela
le diste alas a tu retoño para volar.
y el quiere volar… su vuelo…
en busca de su felicidad…
Callo hoy,
yo… callo… y mi voz hoy se torna llanto.
por el pichón,
callo, hoy lloro por la triste paloma…
que nada consuela su dolor.
Paco
10-09-09
2 comentarios:
A veces el silencio es nuestra compañera alada, la nostalgía la madre de esos pichones de ausencias y dolor, y debemos dejar que siga su vuelo callando la voz.
Un honor conocerlo, y deleitar la mirada con sus letras, le dejo un cordial abrazo porteño.
Sí, guarda tus palabras en silencio, calla.
Calla, todo lo que quieras decir, calla, no hables, sólo en un silencio enmudecido, dále tu presencia, sólo eso, presencia silenciosa.
Qué ese árduo silencio sólo lo corte el sonido del latir del sentimiento que desborda tu ser. Pues, hoy... "nada consuela su dolor".
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