Sonaba una música barroca,
su bajo continuo, su melodía pausada,
y el sonido de un oboe me secuestra,
se lleva mi conciencia… ¿A dónde…?
Voy cogido de una mano vieja, llena de arrugas, fresca… dulce.
Miro y es mi vieja abuela, me veo… he vuelto a la niñez. y paseo en un día lleno de perfume por la calle donde tantas veces corrí, por la calle que haces año ya olvide,
Mi abuela, se gira, baja y tras un dulce, tierno, calido beso me dice tan solo “te quiero”
me abrazo a ella, tan solo le digo…”Abuela… cuanto te añoré” mientras una lágrima surcaba mi mejilla…
El sonido de unos enérgicos trombones me devuelven a mi hoy… donde mi abuela hace años murió, y su recuerdo había caído en el olvido del día a día.
Entra corriendo, precipitadamente mi primogénito, lo cojo en su alegre carrera, lo abrazo, tras un dulce, tierno, calido beso tan solo le digo “te quiero”
Él impetuoso en cu correría, tan sólo dice..: Papaaaaa, que me pillan….
Paco
10-08-09
1 comentario:
Por más que lo intento, por más fuerza de voluntad que pongo, no puedo impedir, cada cez que lo leo, que en mi rostro se esbocen las lágrimas.
Gracias por devolverme por unos instantes a mi niñez.
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